A estas alturas del calendario, el problema más acuciante, pero todavía latente gracias a “ la moda de invierno” se llama celulitis. Después de las fiestas navideñas, nuestro cuerpo ha almacenado una buena cantidad de grasas y toxinas y nuestro sistema linfático seguro que tiene más de un problema “ de circulación”. Más adelante, cuando nos habremos sometidos a la dieta de moda, el problema se llamará flacidez. Celulitis y flacidez son dos problemas que van siempre juntos y por este orden. Ganamos unos kilos y la piel se tensa o se rellena; adelgazamos y la piel “·se cae”. ¡Vaya problemón!
La celulitis, ampliamente descrita en anteriores artículos, obedece mayormente a unos factores externos que podemos llegar a controlar, pero que jamás controlamos: alimentación, ingesta de líquidos y actividad física. Es este descontrol “invernal” el que provoca que nuestro organismo no elimine debidamente las grasas y toxinas que nos sobran. Esto significa que la celulitis no entiende de treguas, sino que quiere “guerra permanente”.
La flacidez de la piel puede aparecer en cualquier parte del cuerpo y suele hacerlo por varios motivos, entre los cuales destacaremos la pérdida de peso de forma más o menos rápida debida a dietas inadecuadas y una insuficiente actividad física. Ahora es el momento de anticiparte a la flacidez y encargarte de la celulitis con el tiempo necesario.
Para eliminar la celulitis es imprescindible que tu sistema linfático pueda eliminar de forma natural esas grasas y toxinas que has ido acumulando y para ello deberás tener en cuenta las siguientes pautas:
1.- Basta de alimentos “pro-celulíticos” como los embutidos, la bollería industrial, las bebidas carbónicas y alcohólicas, las carnes grasas y los carbohidratos.
2.- Reduce el consumo de sal y azúcar al mínimo. Mejor si los abandonas.
3.- Acostúmbrate a ingerir entre 1,5 y 2 litros de líquidos al día, en forma de agua e infusiones.
4.- Depura tu organismo con infusiones de cola de caballo, salvia, fucus e hinojo y acostúmbrate a tomar té (verde o rojo) en lugar de café.
5.- Orienta tu dieta hacia alimentos del tipo carnes magras, pescado, aves y verduras como la alcachofa, los berros, el hinojo, la col, las acelgas y los rábanos .
6.- Come fibra en forma de frutas y entre horas, nunca junto con las comidas. Manzanas, peras y piña en especial.
7.- Imponte una rutina de ejercicio físico intenso durante un mínimo de 60 minutos al menos 3 días a la semana (alternos). Tienes que sudar!!
8.- Camina todo lo que puedas cada día y utiliza las escaleras en lugar del ascensor.
Si eres capaz de “reorganizar” tu vida según estos consejos, en el plazo de un mes empezarás a notar cambios en tu organismo que te ayudarán a eliminar la celulitis natural y progresivamente.
¿Y qué pasa con la flacidez?
Con una dieta y una ingesta de líquidos adecuados y una actividad física como la que hemos descrito anteriormente, estarás poniendo trabas a la flacidez. Cuanta mejor alimentación y mayor actividad física, mejor y mayor musculatura. Si musculas bien, tu piel no se va a caer cuando pierdas peso y si comes bien, tu organismo fabricará mayor cantidad de colágeno, factor clave para la elasticidad de tu piel.
Si hemos llegado tarde o si ya te libraste de la celulitis y tu problema se llama flacidez, toma nota de los siguientes consejos específicos para eliminar la flacidez:
1.- Durante tu actividad física rutinaria (punto 7 anterior) combina los ejercicios cardiovasculares con ejercicios de musculación. Para ello necesitarás mancuernas, bandas de resistencia y pelotas de ejercicio.
2.- Cada día, al finalizar tu ducha, aplícate 3 minutos de chorros de agua fría a presión a lo largo de las piernas y los brazos.
3.- Emprende una terapia a base de masajes reafirmantes, en casa o en el centro de estética.
4.- Utiliza cremas hidratantes y reafirmantes a la vez, ricas en principios activos. Cuanto mejor sea su índice de penetración mejor aspecto lucirá tu piel.
5..- Procura tener la piel siempre bien hidratada y no dejes que jamás llegue a estar reseca.
6.- Evita largas exposiciones de la piel al sol y el humo.
7.- No fumes!!
Ya ves, con unos cuantos cambios de conducta como los que te hemos mencionado y con el tiempo que falta para la primavera tienes la oportunidad de adecuar tu cuerpo para que luzca sano y esbelto, sin celulitis ni flacidez cuando llegue la hora de destaparse.